jueves, 21 de agosto de 2014

Toda la familia y amigos de vacaciones en tu casa



Como yo... muchos que vivimos en zonas de playa coincidimos en que el mes de agosto es tan asfixiante como la temperatura.


Es una relación de amor y odio,  nos encanta que haga calor y nos pasamos todo el año esperando que llegue el mes de agosto pero cuando realmente llegan los calores, las aglomeraciones y las playas están llenas de gente, no podemos más que agobiarnos y volver a esperar que llegue un poquito de fresquito, que se termine el bullicio, las comidas copiosas y las colas en los restaurantes.

A esto le sumamos todos los familiares y amigos que vienen a verte... todos a la vez, al mismo tiempo, con los cartuchos llenos de energía, con ganas de playa, ganas de salir, de romper con la rutina diaria que tienen en las grandes ciudades y para eso estamos nosotros aquí... para compartirlo con ellos.

Cada persona tiene su modelo del mundo y con él sus expectativas acerca de cómo quiere pasar esos días, por lo que es normal que surjan discrepancias del tipo; quiero ir aquí o allá, quiero comer en este restaurante o en el otro, prefiero madrugar y aprovechar el día... 

¿Qué podemos hacer para evitar esos problemas?

Después de "sufrir con amor" el año pasado mi primer verano como Marbellí y pasar los meses de julio y agosto rodeada de visitas, alojando familiares en casa y haciendo mil comidas que nunca pensé que en volumen sabría realizar, hablé muchísimo con las personas que ya lo han sufrido y escuché sus versiones... todas muy interesantes e instructivas, donde al final y después de muchas comparativas... estos consejos nos pueden ayudar a todos:

1. Hablar. Antes de que la gente empiece a llegar, hay que hablar y compartir expectativas. De esa manera podemos ver en qué coincidimos y en que no, desde la asertividad y el respeto, decidiremos el desarrollo de las vacaciones.

2. Dar libertad. No significa ir juntos a todas partes y al mismo tiempo, se trata de compartir actividades conjuntamente y otras por separado.

3. Respetar. Cada uno tiene sus gustos, deseos y formas diferentes de disfrutar su día. "Quienes somos para juzgar la felicidad de la otra persona? ¿Qué patrón es el correcto? Respeta y serás respetado.

4. Cuida tus emociones, ya sabemos que cuando una emoción sube la inteligencia baja, podemos hacer o decir algo que realmente incomode al resto y a la convivencia, por lo que como ya al ser conscientes de  que hace mucho calor y estamos con muchas visitas dejaremos que la emoción se marche y vuelva la inteligencia así nos dará tiempo a pensar y actuar bajo los 3 puntos que anteriormente os he comentado.

5. Agradece. Las visitas se marcharán igual que el calor y no te habrás dado cuenta que realmente te encanta que llegue el mes de agosto, agradece porque el mes terminará, las visitas se marcharán y realmente después te darás cuenta que el agobio no te ha dejado disfrutar de lo que es realmente importante, ¿ y qué es lo realmente importante?... Lo realmente importante para mí es que vienen a verte y a compartir su tiempo libre contigo.

¿Qué es lo realmente importante para tí?

¿Con qué actitud tomarte el mes de agosto para los que vivimos en la playa 
y los que vienen a vernos?

Depende de mí.
Depende de ti

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